En la actualidad, el aceite de oliva se considera un alimento imprescindible en nuestro día a día. A pesar de ello, no son muchas las personas que conocen su origen e historia ¿Te gustaría conocerlos? ¡Acompáñanos!
Según los historiadores, podemos decir que la producción de aceite de oliva se remonta en torno al siglo XII a.C. Es bastante probable que los primeros olivos se encontrasen en el norte de África, puesto que es allí donde se han encontrado restos fósiles de olivos que se datan del Paleolítico.
A continuación, viajaremos a través de las distintas épocas para poder contaros la historia y origen del aceite de oliva.
Para los egipcios, el aceite de oliva era muy importante. Para ellos, la diosa Isis enseñaba a los hombres a cultivar el olivo. De hecho, era tan importante para su cultura, que muchos sarcófagos de faraones aparecían olivos representados.
La principal función del aceite de oliva para los egipcios era cosmética o farmacéutica, ya que el rendimiento del aceite que cultivaban no era muy alto. Es por eso, que se servían de aceites de otras zonas como Grecia.
Podemos conocer la gran importancia de este oro líquido para los griegos, gracias a la gran cantidad de joyas, cerámicas y otros objetos del día a día en el que estaban representados el olivo y la aceituna.
En la Antigua Grecia, apareció el aceite de oliva en la Isla de Creta, lugar donde se establecieron las primeras rutas comerciales de aceite con pueblos del Mediterráneo y Egipto.
La función de este producto en Grecia, al igual que en Egipto, era sobre todo cosmética y farmacéutica, pero también como combustible. Era un bien que no todo el mundo podía permitirse, el aceite de oliva solamente lo consumían las clases altas de Grecia.
Todas las costumbres y técnicas de cultivo del olivo y la producción del aceite de oliva de los romanos, vienen heredadas de los griegos.
Los romanos establecieron a este producto como uno de los elementos más importantes de su economía, convirtiéndose en uno de los principales exportadores de aceite de oliva en el Mediterráneo. Además, con sus numerosas conquistas, permitieron que el cultivo del olivo se expandiera a diversas zonas.
Aumentaron su producción al utilizar animales para mover los molinos.
Como los griegos y los egipcios, utilizaban el aceite con fines cosméticos y farmacéuticos, además de como combustible. La diferencia con Egipto y Grecia, es que en el Imperio Romano, comenzaron a emplear el aceite de oliva como ingrediente en sus recetas, convirtiéndose en uno de los alimentos fundamentales de su dieta.
Es en esta época de conquistas por parte del Imperio Romano, cuando el cultivo de olivos se extendió por mayores zonas del territorio de “Hispania”. Sí que es cierto que este cultivo ya lo habían implementado, en menor dimensión, los Fenicios y los Griegos.
El aceite de oliva que procedía de España era considerado en la época de los mejores, por eso existía una gran exportación de vasijas a otras zonas del Imperio Romano.
En la Edad Media se produjo un declive de la producción de aceite de oliva, ya que se consideraba un producto de elevado coste, por lo que solamente lo consumían las clases más altas.
En esta época se le dio un nuevo uso al aceite, concretamente litúrgico, además de servir de combustible para encender las velas y candiles de los altares de las iglesias.
A causa de la revolución tecnológica de los siglos XIX y XX se mejoraron las técnicas de cultivo del aceite de oliva, pero, por otro lado, se crearon nuevos métodos de iluminación, haciendo que el mercado del aceite de oliva mundial cayese en picado.
Actualmente la producción de aceite de oliva se concentra sobre todo en la zona del Mediterráneo, siendo España el mayor productor de aceite de oliva del mundo. Así, la Unión Europea se ha convertido en el conjunto de países que más consumen aceite de oliva y que más exportan.
Gracias a la calidad de nuestra dieta mediterránea, el aceite de oliva se ha convertido en uno de los ingredientes fundamentales en la dieta de muchas personas, por lo que se ha visto aumentada la demanda del producto, no solo por su sabor, sino también por su gran número de beneficios para la salud. Si te interesa conocer cuáles son, te recomendamos nuestro post “Beneficios del AOVE para la salud”.
Ahora ya conoces la historia y origen del aceite de oliva. Si te ha resultado un post interesante, te invitamos a que leas otros post de nuestro Blog y, si tienes alguna duda, puedes ponerte en contacto con nosotros ¡Estaremos encantados de ayudarte!
